
Autora: Katya Salazar
El jueves 7 de marzo se llevo a cabo una Sesión Extraordinaria del Consejo Permanente con las organizaciones de la sociedad civil y otros actores o usuarios del Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Ese día, por la mañana, fue conocido un proyecto de resolución para ser discutido en la Asamblea General Extraordinaria del 22 de marzo y presentado por el Presidente del Consejo Permanente en el que se resolvía en el punto 3:
3) Encomendar a la Secretaría General de la Organización de los Estados Americanos que, sobre la base de propuestas que presenten los Estados Parte de la Convención, elabore un proyecto de enmiendas a la Convención Americana sobre Derechos Humanos y, previa consideración de los mismos, lo someta en el segundo semestre del 2014 a la consideración de la Asamblea General, en un periodo extraordinario de sesiones, para lo que estime conveniente
Durante la Sesión Extraordinaria, varias organizaciones expresamos nuestra profunda preocupación sobre este proyecto de resolución que pareciera volver a iniciar un proceso que está terminando y que además va claramente en contravía de lo expresado por diversos Estados durante las últimas semanas, tanto en foros públicos como privados, quienes de manera clara han mostrado su satisfacción con el informe de la Comisión Interamericana y con las propuestas de reforma que esta se alista a realizar. También se expresó la necesidad de culminar con el proceso en el plazo previsto, que es el 22 de marzo.
Cabe destacar que en sus respuestas, los Estados que abordaron el tema de la propuesta de resolución se distanciaron de ella, señalando que era solo una propuesta; algunos expresaron que la habían recibido ese mismo día o incluso que no la habían visto. El representante de Nicaragua (país que tiene la presidencia del Consejo Permanente) reiteró que era solo una propuesta. Por su parte, la Secretaria General de la OEA expresó al inicio de la reunión su satisfacción con el informe de la CIDH y su deseo que el proceso culmine el 22 de marzo, tal como se había acordado.
Algunas organizaciones levantaron su voz para cuestionar las limitaciones en la participación de la sociedad civil durante el proceso y en especial la falta de información sobre esta última reunión. Una medida positiva fue el acuerdo tomado por los Estados en una sesión previa de convocar a una sesión adicional con sociedad civil durante la semana de las audiencias públicas ante la CIDH (11-15 de marzo). Aunque esta nueva reunión aun no tiene fecha se reitero el compromiso de los Estados en este sentido.
Esperamos que -tal como se acordó por los propios Estados- el proceso culmine el 22 de marzo, día de la Asamblea General extraordinaria. Esto, por supuesto, no significa que los actores del sistema dejaran de reflexionar y discutir sobre cómo mejorar el desempeño del mismo, pero lo harán sobre la base de reformas concretas que responden de forma clara y contundente a las preocupaciones que los Estados tenían y que pusieron en marcha el proceso de reforma.